sábado, 31 de julio de 2010

Sí, no es un error

Alma vacía, corazón en sequía. Sonrisa inquieta, palabra escueta. Baños de ilusión, calmaron esa presión, que parecía tranquila cuando estaba dormida. Sin confianza confiando su confiabilidad, ¿cómo puede tal aberrocidad? Mmm...llegó de costado, sin pensar estar a su lado. Apareció de la nada, esa nada como algo. Algo que partió pequeñito para convertirse en el mejor secreto. Ya no quería sólo palabras, necesitaba alabanzas. Halagos reiterativos que hacían temblar hasta la esencia desconocida. Universo gigante, parecía mutante. Esperaba expectante aquel fuego primaveral, que encendió el sol y floreció las multicolor.
Entrelazados y unidos, fuertes. Cuatro luces, dos caminos. Uno grande y devastador, otro más frágil y delicado.

0 comentarios:

Publicar un comentario